Alberich encontró en un manuscrito de su ascendiente Alberich XIII que relataba que si Asgard era atacado los guerreros divinos deberian defenderlo, y que si no eran suficientemente fuertes, había que reunir los zafiros de Odín y colocarlos sobre su estatua para obtener la Espada Balmunga. En ese momento Alberich comienza a ambicionar la Espada Balmunga para poder dominar el mundo por la fuerza.
Alberich no era muy querido por Hilda, que quería que pusiera su inteligencia al servicio de Asgard, o se vería obligada a expulsarle del palacio. Después Flare le dice que no se enfade y que le dice que Hilda es severa con el por su propio bien, y que al ser el hombre más inteligente de Asgard espera mucho de el. Alberich le contesta que le odia y por eso le echa.
Alberich presencia como Hilda fue obligada a llevar al Anillo de los Nibelungos. Gracias a esto las armaduras divinas reaparecieron tras la llamada de Hilda y Alberich tenía opciones de conseguir su sueño. Alberich fue elegido para ser el guerrero divino de Delta. Después se presenta ante Hilda de Polaris junto con el resto de guerreros divinos frente al altar de Odín.
Alberich acompaña a Hilda junto con el resto de caballeros divinos al encuentro de Atenea y Flare frente al Mar del Norte. Cuando Seiya de Pegaso, Hyoga de Cisne y Shun de Andrómeda se lanzan contra Hilda, Alberich y el resto de guerreros divinos intentan detenerles, pero Hilda les dice que no deben perder el tiempo en pararles, y que es preferible hacerles sufrir antes de matarles, entonces todos se retiran.
En el palacio Alberich informa a Sigfried que Tholl de Phecda ha perdido su combate contra Seiya de Pegaso y había muerto. Posteriormente informa a Sigfried, en presencia de Syd de Mizar, de la muerte de Fenrir de Alioth. Alberich se da cuenta ante las indecisiones de Syd y Sigfried, tras la muerte de Mime de Benetnasch, de que Hilda está mal asistida. Les dice a los 2 que si van a la batalla sin reflexionar ellos también morirán. Les dice que deben usar la astucia para hacerles caer en una trampa.
Alberich dice que todos los medios son buenos para ganar. Entonces llega Hilda y le pregunta a Sigfried si Mime a perdido su combate, y este le dice que si. Alberich le dice a Hilda que cree ser capaz de vencer a los caballeros de bronce y que tiene un plan infalible para matarlos el mismo. Hilda le autoriza a proceder.
Alberich piensa que por fin ha llegado el momento que esperaba. Alberich recuerda como Hilda le detestaba pero como cambio desde entonces y ahora confiaba en el. Alberich pensaba en ocupar el lugar de Sigfried al lado de Hilda. Mientras iba andando por el bosque cercano al palacio vio que alguien se acercaba corriendo entre los árboles.
Cuando Alberich busca al intruso, este le ataca desde un árbol, pero Alberich le esquiva y después le lanza varios golpes que vuelve a esquivar, para después ocultarse entre los árboles evitando un golpe de Alberich. Alberich sale en su búsqueda hasta que le frena. Alberich le pregunta quien es, aunque no se lo dice, y Alberich se da cuenta de que es una mujer (Marin de Águila) y dice que solo las mujeres caballero están obligadas a llevar mascara para ocultar su fealdad.
Alberich si se presenta y le pregunta porque quería entrar en el palacio. Alberich le dice que no vivirá mucho tiempo y la mujer le dice que no debería subestimarles. Ambos se atacan mutuamente, siendo el golpe de Alberich el más fuerte estampando a la mujer contra un árbol. La mujer se levanta y Alberich le dice que mire a su alrededor y le dice que está en el Cementerio de Amatista.
La mujer se lanza contra Alberich aunque evita sus golpes en principio aunque después es derribado por sus golpes. Aprovechando la sorpresa de estar en el suelo, Alberich le tira un líquido a la cara para impedirla ver y le dice que todos los medios son buenos para ganar. Entonces Alberich le da un puñetazo en el estomago para derribarla. Cuando se levanta la vuelve a golpear, y entonces la mujer le ataca con las Garras del Águila.
Al repetir el ataque por segunda vez, Alberich le dice que no le sorprenderá con el mismo ataque 2 veces seguidas y la derriba de un puñetazo. Alberich la ataca con el Ataúd de Amatista encerrándola en bloque de amatista. Alberich esperaba la llegada de los caballeros de bronce para añadirlos a su cementerio de amatista.
Poco después llega un caballero que le pregunta su nombre y después le dice que es Seiya de Pegaso. Alberich se da cuenta de que ese era el nombre que decía la mujer anterior. Seiya le dice que se llama Marin y le pregunta que donde está, y Alberich le dice que la ha matado. Seiya no le cree, y Alberich le dice no podrá batirle para conseguir su zafiro de Odín.
Alberich le ataca con el Ataúd de Amatista, pero Seiya le esquiva y le ataca con los Meteoros de Pegaso derribándole. Alberich hace como que le cuesta levantarse y cuando Seiya se le acerca se levanta rápidamente para golpearle, aunque Seiya le esquiva y le agarra para atacarle con el Torbellino de Pegaso y estamparle contra el suelo.
Cuando Seiya le dice que va a cogerle su zafiro, Alberich le muestra a Marin encerrada en bloque de amatista y le dice que no le dejará salir vivo de allí. Alberich le dice que el Ataúd de Amatista absorbe la energía de los que están prisioneros en el. Seiya se lanza a por Alberich, que le dice que si muere nadie más podrá sacar a Marin del Ataúd de Amatista, haciendo que Seiya se pare.
Alberich le dice que para salvarla le tiene que prometer obediencia y le de el zafiro de Odín de Tholl de Phecda. Alberich le insiste de nuevo a Seiya ante su falta de decisión. Seiya le dice que está mintiendo, pero Alberich lo niega y le insiste de nuevo a Seiya a que se decida. Seiya se niega a darle el zafiro de Odín de Gamma y le ataca con los Meteoros de Pegaso derribando a Alberich.
Alberich se levanta diciendo que los caballeros de bronce no respetan la vida de sus amigos. Seiya le dice que si la libera le perdonará la vida. Alberich le dice que ya ha perdido mucha energía y Seiya le dice que pagará su crueldad con su vida. Seiya ataca a Alberich con los Meteoros de Pegaso, pero este los esquiva saltando sobre los árboles, y de uno de ellos saca la Espada Llameante con la que intenta golpear a Seiya aunque este le esquiva.
Alberich le dice que la recibió con la armadura divina de Delta y que con ella le matará. Alberich se lanza contra Seiya intentando golpearle con la Espada Llameante pero Seiya le sostiene los brazos evitando el golpe. En un pequeño despiste de Seiya, Alberich le da un rodillazo y después le golpea 2 veces con su espada, en el pecho y en las piernas. Seiya se levanta rápidamente y hace saltar la Espada Llameante de la mano de Alberich de un golpe, pero su brazo le queda chamuscado al hacerlo.
Alberich aprovecha que Seiya está herido para atacarle con el Ataúd de Amatista encerrándole en un bloque de amatista y haciendo que Seiya pierda el zafiro de Odín que tenía. Alberich recoge el zafiro y dice que ahora Seiya tendrá tiempo para lamentar haber luchado contra él.
Alberich sabe que si reune los zafiros de Odín podrá conseguir la Espada Balmunga de Odín y destruir a Hilda, para poder ocupar su lugar y dominar la Tierra. Después llega Hyoga de Cisne al que Alberich le da bienvenida al Cementerio de Amatista para presentarse después y le reconoce a Hyoga que fue el quien encerró a Marin y a Seiya. Alberich le pregunta si tiene otro zafiro de Odín y Hyoga le dice que tiene el de Hagen, y que le quitará el suyo. Alberich le dice que también tiene el de Tholl.
Hyoga le dice que necesita los zafiros para destruir el Anillo de los Nibelungos y Alberich dice que esa también es su idea. Alberich ataca a Hyoga con la Espada Llameante haciéndole una marca en el pecho, después Hyoga le ataca con el Polvo de Diamantes congelando la Espada Llameante, pero Alberich consigue reactivarla.
Alberich vuelve atacar a Hyoga con la Espada Llameante, entonces Hyoga se lanza a sus pies agarrándoselos con las manos y congelándoselos. Alberich consigue quitarse a Hyoga de encima golpeándole en la espalda con su espada derribandole, para después derretir el hielo de sus pies con la Espada Llameante. Cuando Hyoga está en el suelo Alberich aprovecha para intentar golpearle con la Espada Llameante pero Hyoga le esquiva varias veces y después de la da un puñetazo en el estomago derribándole y estampándole contra un árbol.
Cuando Alberich se levanta Hyoga le ataca con el Trueno del Alba encerrando a Alberich en un bloque de hielo. Alberich consigue liberarse gracias a la Espada Llameante y se lanza contra Hyoga pero este le evita, y Alberich del golpe rompe varios bloques de amatista que había a su alrededor. Alberich le dice a Hyoga que debe alegrarse al verle todavía vivo, porque si muere Seiya y Marin estarán condenados a morir en el Ataúd de Amatista que absorbe su energía vital. Alberich dice que solo el puede liberarles.
Alberich le dice que puede salvarles si le da el zafiro de Odín de Beta. Alberich le da a Hyoga 5 segundos para que se lo piense. Hyoga prefiere luchar y Alberich le ataca con el Ataúd de Amatista y Hyoga con la Ejecución de la Aurora. Aunque en principio Alberich tiene ventaja Hyoga le termina estampando contra un árbol, para después hacer un círculo de fuego con su espada y frenar el ataque de Hyoga. Justo después salta sobre Hyoga con su espada aunque consigue esquivarle, y después le lanza por los aires.
Alberich le dice que no tendrá coraje para matarle, después Hyoga le ataca y sale tras de él saltando por los árboles. Cuando Hyoga se para Alberich se lanza contra el con su espada aunque solo consigue romper un árbol. Alberich le dice a Hyoga que le destruirá con una técnica secreta desarrollada por su estirpe en Asgard. Alberich le dice que con ese ataque puede controlar a la naturaleza. Alberich invoca a los Espíritus de la Naturaleza, y en ese momento los árboles comienzan a atacar a Hyoga hasta que le derriban.
Alberich sigue invocando a los espíritus de la naturaleza, y la tierra y los árboles siguen enfrentándose a Hyoga consiguiendo atraparle por un tiempo aunque Hyoga termina por liberarse pero antes de que pudiera reaccionar los árboles comienzan a golpearle y le vuelven a derribar. Hyoga se levanta muy costosamente y Alberich le ataca con el Ataúd de Amatista y en ese momento llega Shiryu de Dragón que detiene el ataque con su escudo salvando a Hyoga, que después se desmaya.
Shiryu se presenta tras ser preguntado por Alberich. Alberich recuerda que su maestro se ubica en los 5 Picos para sorpresa de Shiryu. Alberich le dice su antepasado Alberich XIII combatió contra el para después relatarlo en sus memorias, las que Alberich encontró. Alberich dice que ganará el combate no como entonces ocurrió. Shiryu se niega a darle a Alberich el zafiro de Odín de Epsilon. Alberich le dice que tras derrotarle tendrá 4 zafiros.
Alberich ataca a Shiryu con el Ataúd de Amatista, pero este lo detiene con su escudo para sorpresa de Alberich y luego hace saltar la espada de Alberich. Entonces Alberich invoca a los Espíritus de la Naturaleza y los árboles derriban a Shiryu. Cuando Shiryu se levanta los árboles le atrapan y Alberich le dice que le perdonará la vida si le da el zafiro de Odín que tiene, pero Shiryu se niega.
Shiryu consigue soltarse con la Armonía de la Naturaleza, para sorpresa de Alberich pero cuando Shiryu se dispone a atacar a Alberich con la Cólera del Dragón, los árboles le atrapan de nuevo y le atacan hasta que Shiryu vuelve a frenarlos con la Armonía de la Naturaleza. Alberich sabe que tiene hacerle perder su concentración y se lanza contra el, pero Shiryu le para con su escudo. Alberich le dice que ya Seiya y Marin tienen que estar muertos, lo que distrae a Shiryu.
Alberich vuelve a usar a los Espíritus de la Naturaleza y Shiryu intenta frenarlos aunque estos le golpean. Shiryu vuelve a entrar en armonía con la naturaleza pero Alberich le dice que solo prolonga su agonía. Alberich le dice que cuando reúna todos los zafiros de Odín se apoderará de la Espada Balmunga. Con esto Shiryu pierde la concentración es derribado de nuevo por la naturaleza. Alberich le cuenta su ambición a Shiryu y porque quiere conseguir todos los zafiros de Odín.
Shiryu no se cree que Alberich quiera traicionar a Hilda, y entonces los Espíritus de la Naturaleza vuelven a atacarle y derribarle hasta que este usa la Armonía de la Naturaleza y consigue detenerla. Alberich intenta desconcentrarle de nuevo pero no lo consigue y se lanza contra Shiryu lanzándole varios golpes hasta que consigue golpear a Shiryu y derribarle.
Un árbol cae derribado y atrapa la pierna de Shiryu lo que Alberich aprovecha para volver a derribarle. Alberich le ataca con el Ataúd de Amatista pero Shiryu evita ser encerrado gracias a su escudo aunque termina siendo derribado por la fuerza del impacto. Shiryu vuelve a levantarse para sorpresa de Alberich. Shiryu se quita su armadura y Alberich aprovecha para atacarle de nuevo con el Ataúd de Amatista, entonces Shiryu le ataca con la Cólera del Dragón golpeando a Alberich de pleno para sorpresa de este, que al final termina muriendo.
Sucesos Exclusivos del Manga:Alberich es un personaje puramente del anime. Por lo tanto no hay mencion alguna en el manga.
Técnicas:-
Amethyst Shield (Ataúd de Amatista, Coraza de Amatista): Alberich cruza los brazos y luego los levanta en el aire mientras su cuerpo se cubre de con una capa de color púrpura. Después proyecta multitud de fragmentos de amatista y estos se acumulan sobre su víctima para formar un ataúd. La persona encerrada es paralizada mientras el ataúd va absorbiendo su fuerza vital y su carne, para acabar en los huesos.
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Flaming Sword (Espada Llamente): Alberich usa esta espada de cristal que es capaz de incendiarse. El calor producido es capaz de destruir bloques de hielo. También es capaz los ataúdes de amatista.
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Nature Unity (Unión con la Naturaleza, Espíritus de la Naturaleza): Para ejecutarla levanta su brazo izquierdo, se concentra y envía su cosmos a los árboles cercanos que toman vida demostrando hostilidad hacia su enemigo. Alberich logra llamar y manipular a las fuerzas naturales, usándolas para que ataquen a sus enemigos. Alberich debe permanecer concentrado para utilizar esta técnica. Es una técnica secreta transmitida en la familia de Alberich de generación en generación.
Habilidades:Alberich es capaz de lanzar un ácido corrosivo desde el antebrazo de su armadura, para cegar a su enemigo.
Mitología:Alberich era un legendario hechicero originario de los mitos de la Dinastía Merovingia de los Francos entre los siglos V y VIII, y cuyo nombre significa "rey de los elfos" (elbe "elfos" reix, rex "rey"). También es conocido como el "rey de los enanos".
En el Nibelungenlied es un enano que custodia el tesoro de los Nibelungos, pero es vencido por Sigfried.
Manto Divino: