Thanatos estaba encerrado junto con su hermano Hypnos en una pequeña caja protegida por el sello de Atenea, que estaba dentro de un mausoleo en las afueras del Castillo de Heinstein.
Un día la caja fue abierta por Pandora y ambos fueron liberados. Le dijeron a Pandora que Hades volvería al mundo de los vivos reencarnado en su hermano, cuando despertarán los 108 espectros, y que le darían poder para dirigir a los 108 espectros.
Pasado un tiempo, Thanatos fue avisado por las ninfas de la llegada de un ser extraño a los Campos Elíseos. Thanatos fue ha comprobar que ocurría y comprobó que se trataba de uno de los Santos de Atenea, Seiya de Pegaso. Thanatos se presentó ante Seiya como un sirviente de Hades desde la era Mitologica, y no como un espectro como Seiya creía.
Thanatos le dijo a Seiya que Atenea había muerto y que su hermano Hypnos le estaba entregando su cadáver a Hades. Cuando Seiya se acerco a Thanatos para preguntarle, Thanatos le atacó aunque sin necesidad de moverse para hacerlo. Cuando Thanatos iba a volver a atacar a Seiya, que estaba tirado en el suelo, con intención de matarle llegó Hypnos para advertir a Thanatos de que en los Campos Elíseos nunca se había derramado sangre, y que tendría que disculparse con Hades si lo hacía. Thanatos decía que no podía mantenerse al margen de la llegada de Seiya a los Campos Elíseos y que su presencia allí ya había manchado la pureza de los Campos Elíseos.
Thanatos también dijo que había matado a Pandora por traicionar a Hades y por ayudar al Caballero del Fénix a llegar a los Campos Elíseos, y que no se podía permitir la traición contra Hades. Además creía que el e Hypnos bastaban para defender a Hades aunque hubiesen muerto los 108 espectros y Pandora.
Hypnos le dijo a Thanatos que había capturado a Atenea pero que no la había matado, porque el único que podía matar en los Campos Elíseos era Hades. También dijo que Atenea estaba en el Templo de Hades dentro de la Gran Vasija sumida en el Sueño Eterno que el mismo la había provocado.
Seiya salio corriendo hacia el Templo de Hades y Thanatos le dijo a Hypnos que mataría a Seiya aunque tuviera que manchar de sangre los Campos Elíseos. Thanatos ataco desde lejos a Seiya pero este lo esquivo gracias a las alas de su armadura y le contraataco con los Meteoros de Pegaso y continúo el camino hacia el Templo de Hades.
Hypnos le dijo a Thanatos que no lograría vencer a Seiya si no luchaba con todo su poder. Thanatos decía que no debía subestimar su poder y volvió a atacar a Seiya destruyendo las alas de su armadura. Seiya se levanto de nuevo tras escuchar la voz de su hermana, y ataco a Thanatos con los Meteoros de Pegaso que se terminaron convirtiendo en el Cometa de Pegaso parando el ataque de Thanatos y golpeándole.
Thanatos apareció ante Seiya sin recibir ningún daño y le dijo que el también era un Dios como Hades, el Dios de la Muerte, y que un ataque de un humano no le puede hacer nada a un Dios. Pero Thanatos se dio cuenta de que el cometa de Seiya le había echo un poco de sangre en una mano, lo que le hizo enfurecerse.
Thanatos comenzó a golpear a Seiya que estaba tirado en el suelo por el cansancio. Thanatos también quiso hacerle sufrir mentalmente y le dijo que mataría a su hermana que estaba en el Santuario de Atenea en la Tierra. Seiya no se le creyó y Thanatos le mostró la imagen de su hermana en el Santuario en ese momento. Thanatos le dijo que al ser el Dios de la Muerte podía matar a cualquiera sin importar la distancia a la que estuviera.
Thanatos le dijo que mataría a su hermana haciéndola sufrir, entonces Seiya se levantó para atacar a Thanatos, pero este le volvió a atacar justo cuando se levantó. Thanatos intentaba matar a Seika, la hermana de Seiya, lanzando enormes bolas de fuego hacia ella, pero fueron repelidas por Kiki y por Marin quienes estaban a su lado. Thanatos les dijo que su resistencia sería inútil y que terminaría matando a Seika. Thanatos les dijo que había derrotado a Seiya que estaba en los Campos Elíseos.
Thanatos volvió a atacar a Seika, pero esta vez Shaina paró el ataque. Entonces Marin, Kiki, Shaina, Jabu, Geki, Ban, Ichi y Nachi se pusieron alrededor de Seika para protegerla de los ataques de Thanatos. Lograron crear una barrera defensiva junto todos sus cosmos y parar el primer ataque de Thanatos, pero Thanatos volvió a atacarlos con más fuerza logrando destruir la barrera, golpeándolos a todos y rompiendo parte de sus armaduras.
Entonces Seiya se levanto agarrando a Thanatos y atacándole con el Torbellino de Pegaso, aunque Thanatos se desvaneció evitando el ataque y haciendo que Seiya recibiera el golpe. Cuando Seiya estaba en el suelo y Thanatos iba a rematarle apareció Shun de Andrómeda quien detuvo el ataque de Thanatos con la Cadena de Andrómeda. Thanatos lanzó a Shun por los aires y le atacó destruyendo la Cadena de Andrómeda que no pudo resistir el ataque.
Thanatos que iba a atacar a Shun de nuevo fue atacado por Shiryu de Dragón con el Dragón Naciente, aunque lo esquiva y contraataca a Shiryu derribándole. De repente Thanatos siente que tiene medio cuerpo congelado, y es atacado por Hyoga de Cisne quien le congela del todo. Pero Thanatos consigue librarse del hielo y ataca a Hyoga y a Shiryu derribándoles. Le dijo a Hyoga que tendría que llegar hasta más que el cero absoluto para poder congelarle.
En ese instante apareció Ikki de Fénix. Thanatos descubre que Ikki lleva puesto el colgante de Pandora, que le permitía moverse por el Infierno. Thanatos lanza a Ikki por los aires rompiendo el colgante de Pandora. Ikki se levanta y le ataca con las Alas Ardientes del Fénix consiguiendo romperle la mascara a Thanatos. Por eso Thanatos contraataca a Ikki con más fuerza con la que se lo hizo a los otros caballeros de bronce, atacándole con la Terrible Providencia, destruyendo la armadura del Fénix.
Cuando Thanatos iba a rematar a Ikki que estaba en el suelo siente una vibración proveniente del Infierno de las 12 armaduras de Oro. Pero Thanatos sabe que las armaduras de Oro no pueden llegar a los Campos Elíseos sin la ayuda de un Dios, y no se preocupa por ello.
A su espalda estaban ya levantados Seiya, Shun, Shiryu y Hyoga, pero Thanatos les ataca a todos a la vez, incluido Ikki, destruyendo sus armaduras. De repente Thanatos siente como se aproximan a los Campos Elíseos algunas de las armaduras de Oro. Entonces aparecen las armaduras de Oro de Sagitario, Libra, Acuario, Virgo y Leo para ayudar a los caballeros de Bronce.
Thanatos se da cuenta de que el único que pudo ayudar a las armaduras de Oro a llegar a los Campos Elíseos es Poseidón. Thanatos se burla de las intenciones de Poseidón y les dice a los caballeros de Bronce que no lograrán vencerle con las armaduras de Oro. Los caballeros de Bronce le atacan todos a la vez pero Thanatos consigue evitar el ataque conjunto.
Thanatos les recuerda que el es un Dios, y con solo ataque logra destruir las 5 armaduras de Oro. Thanatos recoge del suelo la armadura de Atenea, que se le cae a Seiya tras su ataque, para destruirla.
De repente Seiya se levanta emanando un enorme cosmos, lo que sorprende a Thanatos, y se empieza a formar alrededor de Seiya una nueva armadura de los restos de la armadura de Bronce de Pegaso.
Thanatos se asombra al comprobar la forma de la nueva armadura de Seiya. Aparece Hypnos que le explica que es una armadura Divina, lo que hace sorprenderse aun más a Thanatos que no se lo explica. Hypnos le hace recordar que los caballeros de Bronce llegaron a los Campos Elíseos gracias a la sangre de Atenea en sus armaduras y que las armaduras resucitadas con la sangre de un Dios pueden convertirse en armaduras Divinas.
A pesar de todo Thanatos sigue convencido de que no podrán derrotarle, dado que es un Dios. Thanatos ataca a Seiya aunque Seiya lo esquiva fácilmente y golpea a Thanatos arrebatándole la armadura de Atenea. Thanatos ataca a Seiya con la Terrible Providencia pero Seiya consigue frenar el ataque de Thanatos y le contrataca con los Meteoros de Pegaso derribando a Thanatos y destruyendo parte de su armadura.
Thanatos se levanta para volver a atacar a Seiya, pero Seiya le esquiva y le ataca con el Cometa de Pegaso que golpea de pleno a Thanatos destruyendo lo que le quedaba de su armadura y matando a Thanatos el Dios de la Muerte, justo después desaparece la estrella de 5 puntas que Thanatos tenía marcada en la frente.
Técnicas:-
Terrible Providence (Terrible Providencia): Thanatos une sus manos y libera una enorme deflagración de cosmos que daña todo a su alrededor. Está ráfaga de energía es capaz de destruir hasta las armaduras de Oro. Puede pulverizar el cuerpo del enemigo y convertirlo en polvo.
Habilidades:Al ser el Dios de la muerte, Thanatos puede matar a su víctima sin necesidad de entrar en contacto físico alcanzando distancias impresionantes (inclusive dimensionales).
Mitología: En la mitología griega, Thanatos era la personificación de la muerte no violenta. Su toque era suave, como el de su hermano gemelo Hypnos, el sueño. La muerte violenta era el dominio de sus hermanas amantes de la sangre, las Keres, asiduas al campo de batalla.
Era una criatura de una oscuridad escalofriante usualmente representada como un joven alado con una tea encendida en la mano que se le apaga o se le cae. Homero y Hesíodo le hacían hijo de Nix, la noche, y gemelo de Hypnos, insinuando que ambos hermanos discutían cada noche quién se llevaría a cada hombre, o que el Sueño anulaba cada noche a los mortales en un intento de imitar a su hermano mayor. Desempeña un papel pequeño en los mitos, pues quedó muy a la sombra de Hades, el señor de los muertos.
Los dos hermanos, famosos por la rapidez de sus actos, recibieron el encargo de Zeus de transportar el cuerpo de su hijo Sarpedón hasta Licia, para que pudiera recibir de sus familiares la sepultura que merecía. El rey de los dioses había concedido a su hijo una vida que abarcaba tres generaciones, y que terminó cuando Sarpedón acudió a la guerra de Troya al frente de los licios, donde fue muerto por Patroclo. Entonces Zeus pidió a Apolo que purificara su sangre en un río, untara su cuerpo con ambrosía, le vistieran como un inmortal y fuera llevado rápidamente a su tierra, mandato que cumplieron Tánatos e Hipnos.
Tánatos actuaba cumpliendo el destino que las Moiras dictaban para cada mortal. En una ocasión Admeto obtuvo de Apolo la gracia de que las moiras pudieran aceptar que cuando él estuviera a punto de morir, pudiera reemplazarle en su destino cualquier persona que lo aceptara voluntariamente. Cuando esto ocurrió, y tras recibir Admeto la negativa de sus padres, sólo su esposa Alcestis se ofreció a morir por él. Sin embargo Heracles retuvo a Tánatos por la fuerza, intentando persuadirle de que esperase a que a la joven le llegase su hora de forma natural. Tánatos repudiaba estas triquiñuelas de los dioses (especialmente Apolo) que interferían sus funciones, y tras esta pequeña derrota, reclamó el respeto debido y fue incluso capaz de llevarse al mismo Heracles cuando le llegó su turno.
Sapuris: