Historia:
Miho es una niña huérfana que está en un orfanato de Tokio en Japón. Allí convive con varios niños elegidos por la Fundación Kido elegidos para convertirse en caballeros. Estos niños son entrenados en la Mansión de la Fundación Kido antes de que cada uno se marche a distintas partes del mundo a recibir un entrenamiento específico.
El día antes de que estos se marchen, Miho se esconde en un camión de la basura que iba a la mansión para poder hablar con Seiya antes de que se marche. Miho le pregunta a Seiya si realmente se va a marchar y Seiya le dice que si. Miho se enfada al ver la forma en que contesta Seiya y le dice que podría morir.
Seiya le dice que no lo entiende y que solo ve peligro. Miho se enfada más y le dice a Seiya que haga lo que quiera. Al rato Seiya va en un coche y espera a Miho para despedirse pero esta no aparece y Seiya se va, mientras Miho le observa escondida.
Cuando Seiya regresa de Grecia, va al orfanato donde se encuentra a Miho convertida en maestra y cuidadora de niños. Miho creía que nunca más volvería a verle. Seiya le pregunta por el paradero de su hermana Seika, pero Miho se pone a llorar por no poder ayudarle.
Miho le dice a Seiya que si participa en el Torneo Galáctico le será más fácil encontrarla, dado que el torneo se televisa a todo el mundo. Miho le pide que sea prudente en el torneo y en ese momento son interrumpidos por Makoto, uno de los niños del orfanato.
Makoto reconoce a Seiya para sorpresa de este y le dice que es porque Miho siempre habla de él, entonces Miho sale corriendo detrás de Makoto para hacerle callar. Miho observa por televisión el primer combate de Seiya en el Torneo Galáctico contra Geki de Oso mientras ella reza por él. Finalmente Miho celebra la victoria de Seiya ante Geki.
Al día siguiente Miho junto con Makoto, Akira y Tatsuya, 3 de los niños del orfanato, quedan con Seiya para ayudarle a hacer la mudanza. Miho le consigue a Seiya una casa en el puerto. Al día siguiente Seiya volvía a combatir en el Torneo Galáctico, esta vez contra Shiryu de Dragón, pero Miho prefiere no ver el combate y rezar por Seiya en una iglesia.
Cuando presiente que algo va mal vuelve al orfanato a ver el combate por televisión y se encuentra s Seiya y Shiryu luchando sin sus armaduras. Al final del combate Seiya es el ganador y Miho lo celebra con lágrimas en los ojos sujetando una foto de Seiya. Pero cuando Miho ve que Seiya se derrumba se le cae la foto de las manos quedando muy asustada.
Miho sale en un taxi en dirección al coliseo para ver el estado de Seiya, mientras escucha por la radio que Seiya pretende ayudar a Shiryu para evitar la muerte de este ya que se le detuvo el corazón durante el combate. Cuando Miho llega al coliseo anima a Seiya desde las gradas a que salve a Shiryu dado que Seiya apenas tenía fuerzas para permanecer en pie.
Miho presencia como Seiya golpea a Shiryu en la espalda a la altura del corazón salvándole la vida y después va a felicitarle por ello. Al día siguiente Miho va a visitar a Seiya al hospital de la Fundación Kido acompañada de Makoto, Akira y Tatsuya. Seiya se cae de la cama en la que estaba tras una broma de los niños y Miho le pregunta que hace.
Seiya le dice que le duele mucho la cabeza. Makoto se pone a llorar pensando que a Seiya le pasa algo, pero Seiya le dice que no le ocurre nada y después Makoto le dice que no hablaba en serio y Miho se ríe. Entonces llegan Shiryu de Dragón y Shunrey, Miho acompaña a Shunrey que traía pasteles que les reparten a los niños.
Miho, Shunrey y los niños salen de la habitación y cuando regresan, Seiya y Shiryu han desaparecido, y Shunrey le dice que seguramente se hayan ido al coliseo, y Miho se asombra dado que Seiya está herido. Miho y Shunrey van al coliseo donde Ikki de Fénix acaba de robar la armadura de Oro de Sagitario, el premio para el vencedor del Torneo Galáctico.
Miho le dice a Seiya que no debe ir sin su armadura. Ante la cara preocupada de Miho, Seiya le dice que no morirá hasta que no haya encontrado a su hermana. Entonces Seiya y el resto de caballeros van tras Ikki.
La siguiente aparición de Miho es pasados los días en una visita de Seiya al orfanato. Seiya llega cuando todos están comiendo y le da Miho una cesta con frutas como regalo. Miho le dice que los niños estaban preocupados por él, pero Makoto le dice a Seiya que quien realmente estaba preocupada es Miho.
Miho y Seiya se van solos a dar una vuelta por la playa, pero entonces aparece Kiki asustando a Miho por su aspecto, saltando sobre los brazos de Seiya. Seiya le dice que es un amigo y Kiki le dice a Seiya que están atacando la Fundación Kido y Seiya se va.
La siguiente aparición de Miho es en otra visita de Seiya al orfanato, en la que ambos se van a la playa de Luxor acompañados por Kiki. Miho le dice a Seiya que tiene la impresión de que ha cambiado mucho últimamente.
Seiya le dice los últimos acontecimientos le han madurado mucho. Miho le pregunta si seguirá combatiendo y Seiya le dice que ha ido para descansar y que prefiere no hablar de eso, Miho le pide perdón por haberlo mencionado. Cuando ambos estaban más tranquilos, Kiki ve a alguien y le pregunta a Seiya quien es.
Seiya le dice que es Marin de Águila, su maestra. Cuando Seiya se acerca a Marin aparece Misty de Lagarto. Misty le dice a Seiya que ha venido a matarle. Marin le dice a Seiya que Misty es un caballero de Plata. Miho le dice a Seiya que no luche, pero Seiya le dice que avise a Saori Kido y al resto de los caballeros, entonces Miho se va a buscar ayuda.
Miho va al orfanato y desde allí llama por teléfono a la Fundación Kido avisando que Seiya está en problemas y que necesita ayuda. La siguiente aparición de Miho es en el hospital de la Fundación Kido cuando va a visitar a Seiya, al que llevaba unas rosas, pero al llegar a la habitación se da cuenta que Seiya no está en su cama. Desde la ventana Miho ve salir a Seiya cojeando del hospital.
Miho se enfada al ver que Seiya no sigue las recomendaciones que tiene para reponerse. Miho baja y le dice a Seiya que tiene que descansar, entonces Seiya sale corriendo hacia el bosque colindante pese a los gritos de Miho. Miho persigue a Seiya pero este no se deja coger pese a la insistencia de Miho. Cuando Seiya regresa al hospital y se duerme, Miho le ata los brazos para evitar que volviese a marcharse.
Miho aparece de nuevo cuando Seiya, Hyoga, Shun y Saori van de visita al orfanato. Miho está a la puerta del orfanato cuidando de los niños que juegan al fútbol. Al anochecer, Hyoga, Shun y Saori se van pero Seiya se queda un rato más en el orfanato. Miho y Seiya van solos al puerto a contemplar las estrellas.
Miho en esos momentos recuerda su infancia cuando Seiya marchó a Grecia a para recibir el entrenamiento de caballero. Miho le cuenta a Seiya que le vio marcharse pero que no se despidió de él por que estaba herido y tenía mucho orgullo como para hacerlo. Miho le dice que se puso muy feliz al verle de regreso después de 6 años.
Miho le dice que cree que esta vez él y los demás caballeros les dejan para siempre. Seiya le pregunta que porqué cree que se van a volver a irse. Miho le dice que lo sabe y que se lo nota dado que crecieron juntos. Miho le dice que sabe que correrá grandes peligros arriesgando su vida, pero que ella espera que deje de hacerlo algún día para vivir con ella.
Seiya le dice que para poder vivir feliz y en paz tiene luchar para conseguirla. Ambos regresan al orfanato y allí Seiya le promete a Miho que volverá a verla mientras esta se pone a llorar. Entonces se caen del árbol que estaba al lado Makoto, Akira y Tatsuya. Miho y Seiya les echan la bronca por espiarles.
Miho vuelve a aparecer durante la batalla contra Hades, a las puertas del orfanato mientras contempla con los niños un eclipse de Sol que se estaba produciendo. Miho les explica a los niños que este se produce por que la luna tapa al sol. Miho se extraña del eclipse al no haber escuchado nada de él en las noticias y se pregunta si puede ser un mal augurio. Miho espera que Seiya se encuentre bien donde este.
Técnicas:
Ninguna.
Mitología:
Sin mito aparente asociado.